Una oración,
en gramática, es una palabra o un conjunto de palabras que expresan un sentido
por sí solas, por lo que se las considera elementos autónomos.
Una oración escrita
se caracteriza por comenzar siempre con letra mayúscula y por terminar con un punto, a menos que cuente con signos de pregunta
o de exclamación, que lo reemplaza.
Tipos de oraciones
Según la intención del hablante
·
Oraciones dubitativas. Expresan alguna duda.
Por ejemplo: Quizás vaya a la fiesta. / Me parece que el
que llamó era Juan.
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Oraciones exclamativas. Reflejan la emoción
que atraviesa quien la pronuncia. Esta emoción puede ser enojo, sorpresa,
alegría, entre otras. Por ejemplo: ¡No lo puedo creer, me saqué un diez
en el examen final! / ¡Qué susto que me diste, no aparezcas más así!
·
Oraciones interrogativas. Pretenden obtener
algún tipo de información del interlocutor. También se las usa a modo de
sugerencia o incluso para retar a alguien. Por ejemplo: ¿No te parece que
lo que hiciste no es correcto? / ¿Quieres ir al cine
conmigo el sábado?
·
Oraciones desiderativas. Expresan algún
anhelo o deseo del emisor. Por ejemplo: Ojalá que el domingo esté soleado así
vamos a la pileta. / Espero que la pasen muy bien en la fiesta.
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Oraciones declarativas. También conocidas
como “enunciativas”, expresan alguna opinión, idea o
juicio del emisor o narran algún hecho que sucedió o que está por suceder.
Pueden ser afirmativas o negativas. Por ejemplo: Este mes no
llegamos a los objetivos propuestos. (negativa) El efecto
invernadero tiene consecuencias irreversibles en cientos de especies animales. (afirmativa)
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Oraciones exhortativas. También conocidas
como “imperativas”, se usan para ordenar, suplicar,
rogar o pedir. Por ejemplo: Te vas ya a tu habitación. / Por favor, te pido
que me ayudes a hacer la tarea que si no me ponen un cero.